miércoles, 9 de noviembre de 2011

CONDUCIR EN MOJADO.



La última salida que realicé con los compañeros del MC Os Bravús, a O Courel, a la vuelta a casa nos pilló la cola de una tormenta que se había desplegado en la Costa Atlántica y que había sido anunciada con Alerta Naranja. Por suerte para nosotros la tormenta amainó a partir de la tarde pero según ibamos acernándonos a La Comarca del Deza, la lluvia y el viento aumentaban de intensidad lo que hizo que el grupo se disgregara. El motivo es que si  en seco no todos conducimos igual, en mojado mucho menos. Había gente que no estaba acostumbrada a conducir en esas condiciones, para otros la lluvia supone un problema y los menos aunque acostumbrados a pelearse con las inclemencias del tiempo, también tomamos nuestras precauciones.
Leyendo el blog de mi amigo PoluxCriville   entendí que su post sobre la conducción en mojado, venía al pelo para éstas y otras situaciones parecidas. En su contenido encontraremos prácticas  recomendaciones de Pere Casa de www.motociclismo.es/  que considero muy instructivas.

---------------------

Atículo de Pere Casas

 Una de las situaciones más incómodas y que entraña más riesgo al montar en moto, es cuando el asfalto está mojado debido a la lluvia.
 En condiciones de lluvia la adherencia se reduce a un tercio aproximadamente en comparación con asfalto seco. Influye mucha también la capacidad de drenaje del pavimento, la cantidad de agua, la suciedad disuelta en ella y el tipo de neumático. Pero la regla de oro cuando llueve es “frenar recto y trazar suave”.
 Nada de maniobras más bruscas de la cuenta que pongan en problemas el agarre disponible: Trazar fino, inclinar, frenar y dar gas con total delicadeza, se impone como una norma básica.
 Es muy importante también pensar y anticipar tus trayectorias en curva y cambios de trazada de manera que la moto se mantenga lo más vertical posible y lo haga durante más tiempo. Esto será garantía para que los neumáticos tengan el máximo agarre y den mayor capacidad para aceptar esfuerzos en frenada, aceleración y adherencia lateral.
 En agua frena siempre con la moto lo más derecha posible, para que, si se produce un deslizamiento, puedas recuperarla de alguna manera. El freno delantero es más crítico por lo que podemos usar algo más el freno trasero, pero sobre todo hazlo siempre al entrar en zona húmeda con el objetivo de tantear el agarre disponible.
 Cuidado también con el peligroso «aquaplaning». La sección real en contacto con el suelo en una moto es muy pequeña, de modo que para nosotros es comparativamente más difícil que para un coche que ocurra pero no imposible.
 El «aquaplaning» se produce cuando la presión de la rueda no es capaz de romper la película o capa de agua sobre el asfalto, de modo que se pierde el agarre y la goma desliza sobre una capa intermedia de agua. Si ello ocurriera, lo mejor es no hacer nada hasta que la moto recupere el agarre por sí sola: no frenar, no girar, e intentar dirigir la moto hacia alguna zona menos encharcada y peligrosa.

-Recuerda que:
-El peor enemigo bajo la lluvia no es el agua, sino la mala visibilidad. También la de los coches, que van con los cristales empañados, así que mucha precaución y anticipación.
-No hay que tener el miedo al agua. Tómate tu tiempo en ir cogiendo el ritmo y encuentra el tuyo, en el que vayas cómodo.
-Pase lo que pase, bajo la lluvia, debes aceptar que irás a un ritmo más lento, conduciendo mucho más suave y con mayores márgenes.

-Fallos habituales:
-Olvidar que un buen equipamiento no es sólo para no mojarse. También, y sobre todo, mejora nuestra seguridad activa –no se nos empaña el casco, por ejemplo– y nos hace conducir cómodos y por ende más seguros.
-En tiempo intermedio y en montaña, ya con asfalto semiseco, olvidar que al entrar en una zona umbría a resguardo del sol puede sorprendernos la humedad.
-No poner a prueba el agarre real del asfalto sobre el que circulemos tanteando con el freno trasero para evitar sorpresas ante emergencias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario